Resumen:
Las investigaciones han puesto de relieve que los hermanos de una persona con
discapacidad intelectual pueden presentar problemas de identificación y socialización, necesidad
de compensación, adopción temprana de grandes responsabilidades, sentimientos de
abandono, culpa, vergüenza o tristeza. No obstante, y si las necesidades de estos hermanos
se afrontan bien, la discapacidad puede convertirse en fuente de desarrollo personal y enriquecimiento
familiar. En este artículo se presentan las conclusiones iniciales extraídas de
una serie de entrevistas realizadas a hermanos de alumnos de un centro de Educación
Especial. La toma de conciencia sobre el tema nos conduce al planteamiento de este estudio,
con el objetivo de ofrecer pautas de intervención que ayuden a minimizar el posible
impacto negativo de tener un hermano con discapacidad intelectual y facilitar en el resto de
la fratría el desarrollo de actitudes y comportamientos que permitan afrontar situaciones
estresantes de manera constructiva. Se persigue, de manera transversal, prevenir posibles
problemas de tipo psicosocial, asociados al hecho de tener un hermano con estas características,
gracias a la experiencia directa de aquéllos que se han visto confrontados a esta situación.